jueves, 25 de noviembre de 2010

LA DAÑINA TELEVISIÓN DE HOY




 
Cuando somos pequeños no solemos tener una visión global del universo, al contrario, poseemos una visión centralizada, focalizada y corta de nuestro pequeño mundo. De jóvenes esta visión se amplia considerablemente. En nuestro mundo además de nuestros padres hay amigos, maestros, etc.
Los estudios te orientan sobre distintas disciplinas y entre ellas la indispensable geografía, caes en la cuenta de que el mundo que te rodea es mas amplio y mas largo que la punta de la nariz que lo precede.
Súbitamente o paulatinamente, según los casos, ponemos a funcionar nuestro delicado cerebro, ambos hemisferios y todos los órganos periféricos que lo contienen incluido el hipotálamo.
Pero empezamos a darnos cuenta, por nosotros mismos, que todo lo que nos han contado no es del todo cierto. Algunos acontecimientos carecen de valor para nosotros, otros muchos son totalmente intrascendentes en nuestras vidas y muchos mas no son ni siquiera ciertas.
Caemos en la cuenta de que con demasiada frecuencia nos han inculcado supuesto valores inexistentes y nos han negado nuestros propios valores.
Nos amedrentan con la idea de un Dios todopoderoso que es a la vez benevolente y castigador, con la idea de que los mayores tienen toda la razón del mundo, aunque estén totalmente equivocados, y en definitiva, que casi no debes tener ideas propias porque éstas, irremediablemente te llevarán a caer en el error, el error del mundo. Por esta misma regla llegarás a la conclusión de que el diez por ciento de la población del mundo está en lo cierto y el noventa restante vive equivocado.
Como te estás habituando a pensar por ti mismo y no por lo que piensan los demás, llegas a pensar que todo eso que te han contado no es verdad y que muchos mienten.
Ya en la adultez tu maduración mental está casi completada, ya disciernes lo que es posible y plausible y lo que no lo es, y eso te lleva a un cisma que te arrastra a una especie de desesperación y no caes en la depresión porque no sabes que tal cosa existe.
En tal marasmo de dudas comienzas a plantearte, no ya la credibilidad de las trolas caseras, las burradas de los maestros y el exotismo de la iglesia, sino también la de los entes oficiales, léase gobierno, partidos, periódicos y demás asuntos que confieren al ciudadano la oportunidad de conexión con ese mundo del mas acá.
Un día, sin mucha sorpresa por tu parte, dejas de comprar el periódico, las razones son dos fundamentales; parecen estar comprados por esas entidades, con lo cual se publica lo que para ellos es convenientemente publicable, la segunda es que mienten con algún descaro. Pasado un tiempo te confirmas a ti mismo en la idea de que todo es una mentira, una vil trampa en la que habíamos caído los incautos y que el periódico sirve poco mas que para envolver loza y tratos viejos.
Con todo debe haber periodistas honestos, pero no les deben permitir ejercer un periodismo libre que implique una merma pecuniaria en aras de una información veraz.
La comunicación es un hecho incuestionable, salvo que vivamos en una isla desierta, donde sin duda tendríamos menos cachivaches pero mas felicidad.
Desde los tiempos de Galeno, la radio también ha ido tejiendo en nuestros oídos un gran telaraña, taponándola de tal infastuosa manera, que ya no discernimos la verdad de la fantasía. Por las ondas hertzianas se transmite toda clase de cosas inverosímiles.
En el colmo del desafuero nos encontramos con un moderno aparato que en principio nos servia, primero, para estirar las piernas sobre el puff y recostarnos a descansar en nuestro sillón favorito, segundo, para mantenernos entretenidos una tarde de pesado estío o frío invierno y en tercer lugar, o el primero según necesidades y preferencias para mantenernos informados, al día.
Nos hemos decepcionado totalmente. El triste aparto nos inquieta la mayor parte de las veces con su catastrofismo, nos pega los engatusados ojos a su pantalla hasta dejarnos ciegos ante las intrigantes escenas que nos van dosificando con eficaz depravación, otras nos trasmiten información quizás verídica, una y otra vez hasta hacernos creer que todo lo que nos cuenta es la verdad absoluta del mundo. Es una mortificación continua que nos repele y nos deleita a la vez, como una tortura reglamentada bañada de rica miel.
Hemos llegado irremediablemente a la conclusión de que éstos también mienten con gran descaro. Nos hacen creer en sus bajezas, intentan hacernos partícipes de sus oscuras maquinaciones, creen que hablan mejor que nosotros e intentan enseñarnos sus malos modales y costumbres perniciosas. Nos mienten incluso sobre lo que somos, donde vamos, donde estamos o lo que debemos hacer.
Finalmente desconecto su lengua mordaz y viperina y hago que se calle, desconecto el aparato y tomo un libro. El libro lo escojo yo, sé lo que quiero y me interesa leer.
La televisión te lo da todo aderezado para que solo lo mastiques. Yo propongo que nos opongamos a tales aberraciones y escojamos lo útil, ameno, informativo y/o entretenido, bien dosificado para que no te haga mal. Apaga la televisión y reflexiona.

lunes, 1 de noviembre de 2010




No se preocupe Sr. Maestro, tengo reservado un sitio especial para Ud., fue Ud. Siempre atento con los niños y aún con los padres, les enseñó cuanto supo y están agradecidos.
Para Ud. Sr. Magistrado tengo reservado un lugar acá, al lado de su colega. Debió impartir justicia de forma “justiciera” pero en ocasiones se olvidó de su sagrado cometido, ya se repartió justicia al fin.
No sienta congoja Sr. Obispo, no me olvido de su eminencia y del lugar que le corresponde. Ud. consagró su vida a Dios y a los seres terrenales, predicó que había que hacer el bien sin condiciones, repartir justicia y consolar al pobre. Todo Sr. Obispo fue incongruencia en Ud., nunca ejemplarizó su prédica, por el contrario fue rico, ufano y prepotente.
Ud. Sr. Ministro quiso ser un político honesto, trabajar arduamente por los mas desfavorecidos y atender los negocios del estado de bienestar. Muchos confiaron en Ud. una y otra vez, año tras año, mirando el fiel de la balanza con la esperanza de su merecimiento. Al final la corruptela institucionalizada fue mas fuerte que su ética.
Si Dr., Ud. tiene su lugar adjudicado con tiempo. Estudió una carrera de mérito y juró a Hipócrates hacer valer la buena praxis. El médico atiende dolores del cuerpo, la mente y el alma, trata la herida y la hipocondría, al niño, la madre y el abuelo. El médico jamás deja de estudiar, así atiende los males terrenales y actúa como consejero espiritual.
Tu, humilde marino pescador, has expuesto mil y una veces tu vida en el mar, con calmas y tempestades, sol o neblinas. Tienes un lugar reservado también, como todo mortal. Has soportado penurias mil sobrellevándolas con valentía, llevando el sustento a los tuyos.
Tu campesino, tu lugar es especial. Tu has trabajado desde el orto hasta el ocaso, siete días a la semana y en ocasiones hasta con luna llena. La tierra que has trabajado no es tuya, nunca lo fue, tu tierra la tienes debajo de las uñas. Tu y los tuyos han vivido una vida precaria, llena, si llena, de necesidades sin cubrir.
Ud. soldado tiene, por supuesto, un lugar. No sé que galones tiene, si es buen patriota o ha enfilado alguna vez el fusil contra los propios
Para Ud. “señorito” tengo un lugar escogido, no muy diferente del de los demás. Ud. Cree que merece un especial lugar debido a su alcurnia y privilegio, acá lo tiene, reservado para Ud.
Ud. “señorito”, arrogante y déspota, malvado y retorcido tiene su lugar desocupado, sólo para Ud.
Yo no soy nadie, no tengo letras, apenas sé leer. Los míos son humildes y mi trabajo lo heredé del padre, no tengo otra cosa.
Sin embargo soy el que pone a todo el mundo, al margen del rango que ostente, en su lugar, el que le corresponde. Lo hago sin mirar su condición. Soy el enterrador.

lunes, 20 de septiembre de 2010

SONRISAS REGALADAS




Las mañanas son soñolientas, han dormido ocho horas continuas, quiero suponer que han hecho pipí en la noche para no humedecer, innecesariamente, la cama. No se como son los desayunos, si frugales u opíparos, no he estado nunca presente. Me imagino que una come mejor que la otra y la otra peor que la una. Ignoro si, algo remolonas, o contentas, van al colegio, seguramente al mismo del año pasado, la misma aula, la misma profesora, los mismos compañeros, pero, eso sí, otro curso mas. No sé en que curso están porque soy casi analfabeto funcional y saben mucho mas que yo, me enseñan muchísimas cosas, yo también a ellas, intercambiamos información.

Regreso a casa, comer, descansar, hacer tarea y jugar, es el diario ajetreo de ambas. Los abuelos, papá, mamá y la Tata, todos las ayudan y las animan a seguir adelante en la vida diaria.

Son dos partes de un solo corazón, cada uno de los progenitores tiene el suyo, el resto del clan familiar tiene su trocito pequeño, como criaturas divinas que son reparten pedacitos a quién los quiera recoger. Yo he tomado mis dos pedacitos y los guardo celosamente en la caja fuerte del mío, al lado de otros trocitos pequeños de otras personitas queridas. Ellas también guardan el trocito que les regalé del mío y que conste que no voy regalando por la calle a todo el mundo algo tan vital.

Son dos angelitos, angelitas mas bien, cada cual con su personalidad única, la una y la otra. Ambas se complementan increíblemente y están pendientes la una de la otra porque, como ya dije, ambas son partes de un todo. Traviesas no son, sonríen y son serias por momentos, como exigen las circunstancias. No perdieron sus alitas al entrar en la tierra, las tienen guardadas.

Viven la infancia pero no son ajenas a lo que les rodea, son inteligentes y no se les puede mentir, sin embargo las verdades de la vida deben ser destiladas lentamente utilizando el cerebro y no la lengua. Cuando me hablan las atiendo y entiendo y en la charla mezclo, o lo intento, diversión con conocimiento del área que puedo representar.

La Tata es casi una madre auxiliar, suplementaria, está pendiente de todo. Ellas corresponden como saben, con amor y alegría. Una casa estaría vacía sin ellas. No permiten que el entorno se convierta en monotonía perpetua, están al acecho para romper el hielo, o lo que haya que romper.

Una excursión de Domingo se convierte en un gran acontecimiento si están presentes, pues ya saben de botánica, geografía, flora y fauna, escriben correctamente, leen a la perfección y dibujan con primor.

No intento hacer un retrato perfecto, no lo es, en todo hay virtudes y defectos. No conocen aún los defectos, los asimilan como parte de los ritmos diarios en que las cosas se elevan, caen y se vuelven a elevar, como un globo de colores. Son dos caracteres distintos pero no están distantes, son como los polos que se atraen irremediablemente. Se refunfuñan, se ríen y hacen todo lo que hacen las personas bajitas, porque no pertenecen a otra galaxia mas que a ésta en que estamos todos subidos, es la nave que nos lleva.

La carita redonda es la de Laura, es una belleza natural, naturalmente bella. La carita con el perfil griego, romano o egipcio, (caben los tres), es el de Anabel, alias Cleopatra. Las quiero porque se han ganado con su dulzura un lugar en mí. Estaré aquí cada vez que me requieran y necesiten, o me llamen, aunque no me necesiten, no me llamen o no me requieran, estaré ahí para ellas.

Soy como el añadido a una carpeta en el ordenador. Están las carpetas principales, las auxiliares, las anexas y las extras, soy una de esas, no se que nombre tiene, da igual, a mi me da igual como me llamen, si me llaman acudo a ellas y estaré encantado de servirles en algo.

Sin quererlo nos regalan amplias sonrisas con sus gestos, nosotros recogemos sus ademanes y aceptando la sonrisa regalada le devolvemos la nuestra. Maravilloso intercambio.

jueves, 24 de junio de 2010

HAMBRE





La humilde familia estaba compuesta por ocho miembros de todas las edades, abuelos y nietos dormían en la misma estancia, las circunstancias de espacio así lo exigía.


Esto no es un cuento, no es una historia triste, es el relato de una incesante superación nunca detenida.

Como locos sueltos se trabaja cada día de la semana, mientras los mas pequeños acuden forzados a la escuela., se ayuna involuntariamente con frecuencia, no por mandato religioso, y alguna vez el cabeza de familia va a la fábrica sin café en el estómago sin que a nadie le importe.


Perseguidos con harta frecuencia, escapando de las garras de la puerca con asidua habilidad.


Los mas pequeños apenas presienten el peligro pues la edad infantil es la edad de la inocencia, aunque no sea dorada, los adultos totalmente conscientes de las veleidades de la fortuna corren velozmente por una pista de obstáculos que se suceden con demasiada e inaudita frecuencia, cayendo y levantando a cada tropiezo.


Los únicos que no sienten ni temen esa tenaz persecución son las autoridades eclesiástica, civiles y militares,ellos se nutren y alimentan bien, no así el resto del populacho que se siente como en un gran campo de concentración para esclavos del que muy pocos, con fatiga, valor y arrojo, logran evadirse y como quién persigue la quimera de la tierra prometida, vuelan por cualquier medio hacia otras latitudes menos hostiles.

Porque la tierra no es propia, la casa tampoco lo es, el monte sí aunque solo en apariencia, si no te escondes con la leña, las usurpadoras "autoridades" te quitaran la carga y aún te pondran entre rejas, transportar lo que es tuyo por derecho propio y tener que pagar por ello clama a los dioses.


Hoy nuestra familia, la de esta historia, se sentará a la mesa al completo y aún se agregaran esos amigos que nunca faltan a tales eventos. En la vieja mesa de madera, desteñida y gastada, habrá una enorme bandeja ovalada como es usual, alañada eso sí, quizás sea verde pálido su color, está repleta hasta los topes mismos de preciosas papas, guisadas con esfuerzo, floreaditas, un suculento cherne salado, del que se aprovechará hasta el tuétano , preparado con amor y primor, mojo colorado o verde, no lo sé, preparado en el antiguo mortero o almirez de hierro con ajos, pimienta, algo de aceite, -si es que hay- poca por escasa, sal, vinagre y agua al gusto según la tradición, bien majado, es el conduto.


La algarabía de la prole es inmensa, los mayores ufanos, los viejos contentos. Por esta vez no habrá persecución a la familia, no hay persecutores, han burlado, una vez mas, al hambre acosadora. Dormirán con una feliz y extensa sonrisa en la cara. Mañana quizás emigren, será lo mejor.

En la tierra la maldición sea emigrar, al cabo es salvavidas. Lo hicieron los antepasados, tambien los abuelos, nosotros nos fuimos y nuestros nietos nos tendran que seguir porque como dijo un viejo poeta "cuando la tierra te niega lo que te pertenece...

domingo, 23 de mayo de 2010

NOPALES








Manifiestamente incómodos e intolerables, incordiantes como se dice ahorita, barriobajeros chancletudos, con habla netamente escatologico, sin educación alguna, así eran aquellos bellacos que nos tocaba por vecinos.

Importada de América, existe una planta que el diccionario define como higuera de tuna. Es una planta de tallos suculentos grandes y aplastados, erizado de espinas que produce en la época estival un fruto de color blanco o rojo amarillo llamado higo chumbo, de ahí el nombre de chumbera de algunos topónimos conocidos, sin embargo desde la niñez hemos oído llamar a esta fruta higo pico.

Es necesario barrerlos bien, si es con una vieja escoba de palma mejor, para quitarle la mayoría de los diminutos aguijones que posee por millares, lavarlos bien con agua fría abundante y están listos para comer. Antiguamente se pelaban con un cuchillo como a cualquier fruta, se abrían por la mitad y se tendían a secar al sol y entonces, pasado un tiempo, se convertían en una “porreta”, un suculento manjar campesino muy dulce. No hay que abusar de su ingesta pues las numerosisimas “granillas” que posee pueden llegar a producir oclusión intestinal.

En la pequeña capital, atrasada y pueblerina, gran parte de la población era extremadamente humilde, obreros con escasos recursos y pobre educación. Tristemente, hay que decirlo, la iglesia pautaba las reglas. Aquella gente trabajadora repartía a voleo buenos deseos, porque pan no había, sin embargo los que teníamos parientes en el campo eramos acogidos por éstos los fines de semana, como plaga de cigarrones, las bocas se multiplicaban. En la época veraniega florecían las pencas y las higueras de leche, verdaderos atracones para matar a quien te mata eran seculares y esperados, regresábamos a casa hartos como cochinos y con unos cuantos picos en las manos y el resto del cuerpo.

Ocasionalmente cuando los vecinos se hacían con alguna decena de estos sabrosos higos alguno preguntaba ¿a cuantos higos pico tocamos?Nos resultaba chocante y hasta divertido que hubiera que contarlos para comerlos mientra nosotros teníamos ya la panza requintada como un tambor nuevo.

Cosas de niños, cosas de otras épocas evocadas sin rencor.

jueves, 13 de mayo de 2010

LA EXPERIENCIA







Experiencia es todo aquello que se acumula a lo largo de la vida en lo mas recóndito del ser. Si la vida es corta el trayecto es menor, si por el contrario es larga, el cúmulo de acontecimientos puede ser abrumador. El espectro de tales es variopinto pues depende de infinidad de circunstancias que marcaran el devenir de tu vida. De cualquier modo todas, o casi todas, harán marcas, dejaran huella, semejante a la viruela como muesca imborrable, otras se desvanecerán como el vapor, unas serán dulces como miel y otras amargas como la hiel.

Los trasiegos de tu sangre son a la vez virtud y lastre, los fantasmas del pasado afloran con incómoda nitidez, a la vez que dulces quebrantos se suceden para rememorar tus mejores tiempos de aprendizaje, empujados por la inocencia de los primeros tiempos que te poseerán para siempre.

La experiencia es el ancla que llevas atada a tu cuello desde el momento de tu nacimiento y que no existe forma de deshacer. Solo tu constancia y tu trabajo hará que en el tiempo se haga mas liviana. Las circunstancias que te rodean continuamente, acechándote en cada esquina para rasgarte a dentelladas, son un chantaje que te aborda sin descanso.

Atrás quedan las madrugadas viajeras, casi boreales, templadas y amables, en los interminables itinerarios, oyendo una tonada campesina y el instrumento sonoro que se coló en tu memoria. La música te acompañó siempre, en los encuentros y los desencuentros, en la inmensa llanura y a la orilla del mar, cruzando ríos o trepando selvas, explorando siempre, durmiendo al abrigo de la luna, queriendo mas. Las notas claras de esas amadas melodías rudas y bellas , los indefinibles paisajes, tan diversos que se han colado por tu retina y se han alojado en lo mas recóndito de cada neurona, esas vivencias no te las roban, son tuyas y te pertenecen, te adormeces soñoliento reviviendolas con denostada pesadumbre de un tiempo que no volverá jamas.

La cárcel del deber te aprisiona, rumias la rabia de no ser sabio, prudente y objetivo.Tu y los tuyos han estado siempre en movimiento, cruzando el gran charco una y otra vez en ambos sentidos, cruzando todos los mares y aposentando todas las tierras, latitudes y paralelos diferentes.
Cuando la tierra te niega tus derechos levantas el vuelo, con la vieja maleta del abuelo o con el hato al hombro reemprendes de nuevo el camino que ellos trazaron con anterioridad. Ignoras como empezó todo, en que lugar te hallas, cual es tu lugar, donde y como nacistes, si blanco, mestizo, indio o negro. Has pagado con creces el tributo de sangre.





miércoles, 21 de abril de 2010

ENSOÑACIONES



Como cualquier día salí esa mañana a trabajar, no era un día especial, era como cualquier otra monótona jornada de febril trabajo en la calle.Habia salido, como siempre, muy temprano, dando tiempo en el camino a ir despertando paulatinamente pues necesitaba considerable tiempo para espabilar.

Sin darme cuenta casi, me encontré en el centro de trabajo. Dos grupos de compañeros que, sin quererlo,se habían formado en dos corrillos o grupos cuya nota dominante era la edad. En un lado estaban los mas jóvenes y en otro los mas veteranos. En la calle encontré a Marieta con la maleta de su vehículo abierta mientras colocaba en el maletín lo mas importante para su labor. La maleta es algo casi imprescindible y está en todas partes cumpliendo su función. El día era de un gris plomizo como una plancha de acero. Había llovido torrencialmente durante la madrugada y los estragos del aguacero eran visibles por doquier, charcos como espejos, grandes y pequeños, hilillos de agua aún presentes jugueteaban por las adoquinadas calles.

Ahora no llovía con fuerza, sólo una constante sorimba, mojabobos o chipichipi que sin embargo permitía caminar por las viejas callejuelas sin grandes esfuerzos. Caminé sin rumbo fijo, al menos no era consciente de hacerlo.

De pronto me encontré con un caserón enorme cuyo bajo estaba cubierto totalmente de espeso lodo, barro apelmazado y lodo endurecido. Habían estado vaciando el lugar, al parecer para una nueva obra o reconstrucción y por tanto se veía un gran boquete o socavón de mas de dos metros de profundidad, algo oscuro.

No sin dificultad, fui “aclarando” la vista hasta percibir con mas o menos claridad lo que yacía en el fondo. Me costaba distinguir el fondo pues el barro espeso lo cubría todo, sin embargo fui distinguiendo las paredes oscuras y el volumen del final. Pude fijarme en una masa informe, en principio, al lado de otra en su costado que no me dijo nada al primer vistazo, mas luego reparé con mas detenimiento en que esa aparente masa tenia forma, parecía humana. Miraba alternativamente a una y otra sin distingo hasta que noté que los bultos tenían algo de forma física, como los bustos de un escultor.

Quede sorprendido cuando uno de los “bultos” de barro abrió los ojos y movió la boca tenuemente, su gemelo hizo lo mismo. Sorpresivamente pensé en Jesucristo,la idea de la imagen que nos han transmitido. Me asaltó la idea sin premeditarla. Ignoro que quería decirme o que significaba la imagen que había visto. Mi habitual gnosticismo no me permitía ir mas allá. Todo quedó en una imagen fugaz, vívida y momentánea sin razón aparente. He meditado acerca de su contenido sin encontrar un referente de explicación al hecho.

Súbitamente desperté, una apacible placidez me inundaba. Intenté no pensar mas en la imagen pero de cuando en cuando me asalta a la memoria visual. Cuando estuve en pié y alerta fuí consciente de que todo habia sido un sueño.

jueves, 15 de abril de 2010

LA MARAVILLA SALADA



Todas las metáforas se hacen elocuentes y cobran vida por si mismas en el ambiente abrumador y fascinante. Abre los ojos, no sin temor, ante lo desconocido. Su cerebro no asimila de forma rápida la sorpresa que se abre ante él. Es una gloriosa sinfonía de luz y color, las sombras se difuminan sin cesar y las luces cambian, mudan y desaparecen en el enorme y cambiante caleidoscopio.

Estrellas fugaces asustan a las sombras que huyen. El espectro de color es infinito, predominan las variantes de verdes y azules, los rojos y amarillos sitúan las notas de contraste. Todo es movimiento en derredor, movimiento ondulante y fugaz, nada parece permanecer en quietud constante. Acá el espíritu se inquieta, pero al momento pierde su esencia y se integra en el mágico mundo circulante.

Estrellas sin luz propia la reciben del astro y resplandecen con su color, seres diminutos deambulan pululando por doquier, huyen y se esconden, otros se pasean mostrando su esplendor de colores espectaculares, los hay con una infinita gama de grises que los hacen parecer bellos, dinámicos y estilizados en toda su apariencia, también los hay inmóviles como aparentes pedruscos, que no lo son.

Todo es vida , furtiva a veces, vital toda. Extasiado en la contemplación, aunque breve, no se da cuenta, algo pasa repentinamente, ¡falta el aire!, no puede respirar y sus núbiles pulmones suplican con urgencia su dosis vital. Tiene que emerger con súbita rapidez.

Ahora sentado en una roca espera con impaciencia a que salgan las branquias de su cuello.

lunes, 22 de marzo de 2010

TRADICION ANCESTRAL



Tengo que contarte, para tu conocimiento, que ellos han sido, en ocasiones ignorados y otras veces vituperados, tratados con sintomático desprecio. Es propio del que escribe "su historia" y al contacto con otro pueblo trata de desprestigiar a éste.
Tu bien sabes, porque conoces la tradición oral de la que eres portador, que los tuyos son valientes honestos y bravos en la lucha. Tu y yo sabemos que es así y que el orgullo que ha trasmitido a las generaciones nuevas no es vano ni infundado, es tan real como el papel que soporta éstas palabras.
Tu deber ahora es recordarlo con afecto, respeto y gratitud y trasmitir a los demas las enseñanzas, otrora orales, que estan grabadas en el viento, en la piedra y en la tierra. Tu debes construir con nitidez su imagen para que los mas pequeños no se hagan la idea de un fantasma, de un plasma etéreo porque no es eso, él es real, son reales, lo fueron todos.
Tu eres poseedor del troquel que marca de forma indeleble y ese sello no lo debes distorsionar o disimular, por contra debes dar a conocer el valor intrínseco que ha transmitido y que tu debes continuar.
No tomes decisiones desde el complejo, no debes ser humilde sino altivo al usar con ellos los valores morales inherentes a todos.
Muestra orgullo sin metáforas, describiendo la raiz profunda en la tierra, el grueso y robusto tronco, la fortaleza del duramen, las múltiples ramas. Los apendices se extienden mas allá de las fronteras y tocan también otros cielos, otras tierras y otros corazones.
Eres tu ahora portador de la savia, que es sangre, savia roja que tienen tus ojos para que con los suyos puedan ver el pasado y puedan con paso seguro vislumbrar el futuro, porque sin pasado no hay futuro predecible.
La energia no aparece de la nada, siempre ha estado ahí transformandose, acaso con fuerza muscular y cuando el cuerpo muere se transforma pero no desaparace jamás, siempre está ahí contigo.
Toma la energia vital, poseela, úsala y cuando sea el momento transmitela a los tuyos.
Yo confio en que así sea.

martes, 26 de enero de 2010

LAS SENSACIONES INDEFINIBLES







Las sensaciones controvertidas esporádicas y espasmódicas que él experimenta ocasionalmente producen convulsiones a veces explosivas. Son volcanes en erupción, llamaradas de la floresta que se calcina, que el viento aviva y la lluvia apaga. Así son esas extrañas sensaciones que de forma tan compleja bullen en su cerebro sin poder dar explicación cierta a tales hechos que se suceden luego de tensas calmas. Él no puede dar razón de forma explícita a tales acontecimientos, no puede razonar con diáfana claridad lo que sucede, son hechos y circunstancias inexplicables.

En ocasiones cree que razona con esa parte del cerebro analítica y matemática, otras, piensa con esa otra parte cerebral idealista, quizás poética y emocional, la parte artística que lo inunda con ése néctar esencial para él. Otras veces quiere pensar que no es así y que todo tiene razón de ser, es el hígado el que “piensa” y le transmite esas peregrinas ideas que parecen salidas desde otros recónditos lugares del ser.

La mayoría de las veces no es una cosa ni otra. En las distintas etapas por las que ha pasado ha sufrido sucesivas metamorfosis, pero esas erupciones, ese fuego, esos incendios han sido producto de esa sangre que constantemente riega los órganos vitales y de la misma forma que el cerebro no puede quedar sin su alimento, de la misma manera que el estomago necesita mas sangre en la digestión, de la misma forma ese otro órgano anatómico exige en insospechados momentos un aporte extra del elemento líquido. En ese momento se dispara como un chorro, como un enorme y enérgico geiser, la sangre bulle por escapar , sube como un torrente a la cara y colorea con su paleta monocolor las mejillas, empuja el músculo cardíaco acelerando la diástole y la sístole , no hay bradicardia sino taquicardia, algo dolorosa y dulce. El estomago reclama su parte del regalo sanguíneo y empuja las paredes queriendo quebrarlas.

En su mente todo es confusión, no puede explicarlo, no sabe explicarlo, creo que tampoco tiene la intención ni la necesidad de hacerlo, es algo intrínseco en él. Esas sensaciones de éxtasis infinito y muerte súbita son por reales inexplicables, son acontecimientos para guardarlos y dar expresión de ello en ocasiones y circunstancias especiales, son algo secretas para él.